Irónica y amarga, La señorita Else lleva la capacidad de Schnitzler para dar un completo retrato psicológico de un personaje a una de sus más altas cimas, centrando la atención narrativa en el aislamiento humano y en la trágica separación del yo de su realidad circundante.
Todos los fines de semana, en sótanos y aparcamientos alo largo y ancho del país, jóvenes oficinistas se quitan loszapatos y las camisas y pelean entr..